"El cuerpo lleva la cuenta” como dice Van der Kolk.
Buscando seguridad en mi cuerpo de nuevo.
Parece que la ley del cosmos no te deja avanzar sin raspones, si no te volteas a ver y te respetas. Cuando caes tan fuerte y de tan alto solo demuestra hasta donde habías llegado, empeizas a respetarte.
La meta es hacerlo desde el lugar mas amable contigo mismo, aunque nos puede pasar lo contrario, enfurecernos y decepcionarnos de nosotros por volver a ese lugar oscuro de nuevo, es oscuro pero nunca el mismo.
Temporadas donde pasan varias cosas en tan poco tiempo que te mueven, la situaciones van tocándote los botones de lo insostenible descolocándote y nosotros mimsmos volviéndonos a colocar, de alguna manera podemos ser adultos funcionales a pesar de todo lo que llevamos conteniendo en el cuerpo y mente, hasta que colapsamos porque el cuerpo no encuentra otra manera de pedirte que pares.
Pero no es tu culpa.
(al escribir esto, como flasbakc vino esta escena a mi mente: (Good Will Hunting / Mente indomable ) es una película de 1997. Que analizando la película y si la has visto es justo esto de lo que quiero hablar; hay patrones arraigados desde nuestra niñez muchas veces inconscientes que se revelan en nuestra vida adulta y nos pueden congelar al momento de tomar acción o desiciones importantes.
Sucede que muchas personas llevamos viviendo en una respuesta de hipervigilancia inconsciente desde que éramos niños, este sistema no reconoce otro estado que no sea el de la inseguridad y amenaza. No conocemos un estado de regulación duradera hasta que un día un diagnóstico revela la realidad del cuerpo. Y hemos estado todos estos años viviendo desde lo que se conoce como congelación funcional, funcionando a pesar de todo lo que está sucediendo en el cuerpo, enmascarando a través de hiperactividad, comida, sustancias, manteniéndonos ocupados etc., cualquier cosa para no sentir el cuerpo y seguir empujándonos y empujándonos.
Ese rol se empieza a ejercer antes de qué lleguemos al mundo, en el vientre de nuestra madre. El primer sistema nervioso con el que nos sintonizamos es con el sistema nervioso de nuestra madre, nuestras creencias fundamentales se establecen cuando estamos entre los 0 a 7 años aproximadamente, empezamos crear esa seguridad…o no, (para este punto ya sabemos que culpar a nuestros padres no va, la mayoría de ellos la tuvo más difícil) y empezamos a crear mecanismos de compensación y de tratar de encontrar esa regulación y esa seguridad afuera, dependiendo de cómo se configuró ese sistema de apego.
Y no eres incorrecto por esto, de hecho, gracias a estos mecanismos adaptativos has llegado hasta donde estas ahora, pero como adultos una vez conscientes somos menos indiferentes.
Todos hemos atravesado algún trauma de mayor o menor medida en nuestra vida, es algo inherente del ser humano, esto también es algo que nos conecta como humanidad.
Aclarando que trauma no es únicamente un accidente desastroso o estar en la guerra etc., es cualquier situación emocional que nos desborde e impacte nuestro sistema y este no sea capaz de procesar.
Cuando caemos de nuevo a la oscuridad se puede sentir eterno, y que eres incapaz de salir del mar inmensamente picado, pero en pequeños lapsos a veces se siente bien estar mal. Algo por dentro sabía que esto o se rompía o terminaría el cuerpo de revelarlo con algo más grave.
Me sentía avergonzada por ser tan cobarde y no moverme del pantano en el que construí mi bello y cómodo hogar. (Sherk, I fell you).
Compararme con los procesos de los demás… si, ya sé que no funciona, pero hay un placer del ego en caer en la trampa de culparnos por tener angustia, dolor, miedo, y pensar: ¡¿otra vez?!, ¿por qué no puedo conformarme con esta vida?, al parecer los demás tienen un mejor cerebro que el mío, o un mejor terapeuta, menos traumas y mejor gestión de emociones.
Ya se habían presentado focos de alerta pero es como si el cuerpo hiciera llamadas telefónicas, y a mí solo me molesta y me pone ansiosa contestar, porque no tengo la capacidad de un sistema nervioso que soporte ese información o voltaje emocional.
Nuestro sistema nervioso está diseñado maravillosamente, para mantenernos a salvo, pero no está diseñado para ayudarnos a crecer, hay que resignificar, actualizar y recablear el sistema.
No hay una fórmula única, cada quien tiene un patrón único energético y nuestra responsabilidad es prestar atención, realmente sentarnos con nosotros mismos darnos el tiempo de preguntarnos qué es lo que realmente necesitamos, no evadirnos y ver que es lo que funciona para nosotros en este momento.
La buena noticia es que existe la neuro plasticidad y está disponible toda nuestra vida no solo en los primeros años, el trauma no tiene que convertirse en una cadena perpetua.
Ahora comienzo a integrar este camino con prácticas que ya realizaba como yoga, que siempre me ayuda a volver a mi centro y otras que no hacia; donde lo principal es incluir al cuerpo, presencia y sentir lo que se tenga que sentir. Leyendo otros tipos de abordaje y experimentando en mi cuerpo.
El abordaje de arriba hacia abajo es esencial (mente - cuerpo) nuestras creencias, pensamientos etc, pero no podemos dejar de lado el abordaje abajo hacia arriba (cuerpo - mente)
practicas somáticas
yoga
breath work
masajes
grounding etc.
Prácticas que nos ayuden a sentirnos seguros en nuestro cuerpo.
Al final nunca estamos “hechos” o “graduados” de nuestro trabajo interno, pero volteo atrás y observo que no la pasaba nada bien y ahora agradezco donde estoy, y esa referencia me motiva a seguir y tener certeza de que la vida si se puede poner mejor.
Joe Dispenza dice que: El mayor coraje está en abrir tu corazón.
“The final battle is the hardest one, overcome the emotion. Overcome the trauma.”
A veces para liberar algo tenemos que permitirnos sentir y sentir a veces no es cómodo.
Hace muchos años leí esta frase de una poeta (que no recuerdo su nombre) pero decía:
“Todo lo que puedes sentir lo puedes sanar”
La realidad es que me molestó la frase, quizá por eso nunca la olvidé; me molestaba el hecho de sentir, sentir, sentir, y emociones bla bla bla, pensaba: -¿no hay otra forma más pragmática, práctica para sanar sin el drama de las emociones y el sentir?
Ahora en retrospectiva veo el miedo que tenía a sentir, la negación y la desconexión con mi cuerpo, (paradójicamente soy fisioterapeuta); apasionada por el cuerpo porque inconscientemente dentro de mi sabía que el cuerpo con una guía, es el sanador por el mismo.
Observo con curiosidad esa Yolanda de hace 4 años que se molestaba con sentir, que posponía sus sentimientos, necesidades y emociones para ser validada por no sé quién, porque así le enseñaron que era lo correcto, mi sistema solo quería protegerme del rechazo y la amenaza que implicaba conectar con mis emociones y cuerpo. Era la herida de una niña que le aterraba sentir todo eso, ahora haciendo las pases, me propuse hacerlo de la manera más amable, no con catarsis y practicas intensas de liberación de emociones que en ocasiones me fueron necesarias pero ahora de maneras muy tituladas y con calma que le permitan a mi sistema nerviosos sentir seguridad.
Espero que esta lectura te sea útil de alguna manera.
Con cariño Yolanda muaaa!
Esta lectura cayó en el mejor momento y por supuesto que ayudó.
:D
Gracias y Felicidades
Pensar, sentir, vivir, entender, comprender, aceptar son verbos comunes en el habla pero que comprometen el cuerpo y el alma de quien los quiera practicar. Gracias por tus palabras. Sólo podemos comprender el mundo a través de lo que hemos vivido. Pero nada impide que creemos un mundo nuevo, propio y a nuestra medida.